¿Te imaginas al orgulloso príncipe de una estirpe de guerreros espaciales hiperpoderosos yendo de vacaciones con su familia terrícola?
¡¡¡ESTA RESEÑA CONTIENE SPOILERS, OJO AL DATO!!!
No haca falta que te lo imagines, pues ya lo hacen Akira Toriyama y Toei Animation por todos nosotros. Dragon Ball Super continua su periplo centrándose en el trío familiar de Capsule Corporation (Vegeta, Bulma y Trunks) en un día concreto en sus vidas en el que realizan un viaje a un parque de atracciones (tipo Terra Mítica), usándose el hilo de la continuidad para ello. Si recordamos la Saga de Boo, durante un entrenamiento, Vegeta promete a Trunks llevarle al parque de atracciones si este consigue golpearle. Trunks lograba rozar a su padre en la mejilla y este debía cumplir su promesa, sin embargo, nunca vimos que la cumpliera, hasta ahora. (Mini punto)
Interesante premisa para seguir presentando la vida de los diferentes personajes de una forma cotidiana durante el periodo de paz. Y es que Vegeta se presta a ello, pues el contraste entre su serio carácter, casi arisco, y la vida familiar puede dar mucho juego, como vemos en este capítulo. Vegeta yendo de compras con Bulma y Trunks, comiendo helado; montando en las diferentes atracciones; asistiendo a un evento nocturno de danza tribal rodeado de gente ebria; dando lugar a un capítulo la mar de divertido, sobretodo en sus primeros compases, que da un salto a través del espacio para mostrarnos las travesuras del carismático Bills, el dios de la destrucción recién despertado de una pequeña siesta de treinta y nueve años, y su ayudante Wiss en un planeta lejano donde una raza alienígena de cavernícolas caza un dinosaurio gigante mediante un guerrero nativo de gran fuerza. Pero Bills, siempre hambriento y perezoso, pretende arrebatárselo ya que corre el rumor de que la carne de dinosaurio es un manjar. Se desata entonces un combate entre el guerrero cavernícola y Bills -¡Al fin, un combate!- donde este último da una ínfima muestra de su elevado poder -destruye planetas, no es un cualquiera- despachando al guerrero cavernícola con extrema facilidad. He aquí un recurso para que el espectador vaya abriendo boca de cara a lo que vendrá: el enfrentamiento entre Bills y un misterioso ser de gran fuerza con el que el dios gatuno soñó años atrás y cuyo nombre no recuerda… el Super Seiyaj… Saiyuj… Saiyajin God, al que tanto aspira a encontrar. A nivel personal, me ha gustado comprobar que el dibujo y la animación han dado un salto cualitativo con respecto al primer episodio, dando lugar a un combate, aunque breve, vistoso y que recuerda a los tiempos de DBZ. Añadir que este instante del episodio da píe a las muchas posibilidades que abre Dragon Ball Super gracias a la específica mención que hace Wiss sobre el Universo 7, el universo al que pertenecen nuestros amigos. (Mini punto)
Mientras tanto, en un remoto y minúsculo planeta, Kaio del Norte conduce su coche en compañía de su inseparable simio Bubbles y, sorpresa, la luciérnaga Gregory (personaje creado para el anime a finales de los 80) que hará las delicias de los fans, tanto por su carga nostálgica como por el hecho de que puede haber muchas más sorpresas respecto a personajes que fueron mencionados en el manga pero sólo aparecieron en el anime. ¿Veremos a los Kaio Sama del Sur, Este y Oeste? ¿Y al Gran Kaio, el rey de los Kaio del otro mundo? A esperar toca. Y entre tanto, Goku irrumpe, nuevamente, en la vida de Kaio del Norte como quien visita a sus abuelos (no olvidemos que Kaio del Norte es un respetable Dios que ha entrenado a numerosos y grandes guerreros durante cientos de años) sucediéndose así más cómicas situaciones donde un despreocupado Goku provoca un destrozo en la casa de Kaio, arrampla con su comida y decide entrenar, sin la total aprobación del paciente Dios, en el pequeño planeta (cuya gravedad es diez veces la de la Tierra) con el objetivo de ser más poderoso por si un nuevo enemigo acechase en el horizonte… Vegeta, finalmente, hará lo propio en su sala de entrenamiento particular. Un momento… ¿Y su familia, acaso los ha dejado “tirados” en el parque de atracciones? Qué queréis que os diga, es el orgulloso príncipe de una estirpe de guerreros espaciales hiperpoderosos… (Mini punto)
Conclusión: divertido, interesante y congruente capítulo que reafirma a Dragon Ball Super como un producto que continua donde DBZ lo dejó (siempre desde el punto de vista del manga) siendo respetuoso con la continuidad mediante hechos pasados “inconclusos”, o no del todo esclarecidos, que aquí utilizan como nexo de unión, dotando a la nueva serie de una mayor credibilidad y atrayendo, sabiamente, a los seguidores de Dragon Ball de siempre (aunque en el capítulo tres hay cosas que ejem ejem, pero ya llegaremos a ello). Por último, aplaudir el tono de humor Made in Toriyama que muestra la serie; atentos al momento Vegeta vs Giant Pulpo Paul. Aun me duele el abdomen de tanto reír. (Mini punto, no, PUNTAZO).
CURIOSIDADES o HUEVOS DE PASCUA:
- Alusión a Dodoria y Zarbon, los dos guardaespaldas deFreezer, cuyos nombres están inspirados en dos frutas: eldurián odurión (“durian” en inglés y japonés) y el pomelo (“zaabon”en japonés). Si bien el color de piel de los personajes no se asemeja al de las frutas en que se basan, si lo hacen la forma de dichas pieles.Dodoria tiene “pinchos” yZarbon al transformarse tiene pequeñas erupciones y piel rugosa como el pomelo.
- Kaio del Norte casi atropella a Goku con su Chevy Bel Air Sedan. Guiño a la escena o cortinilla (eyecatch) que daba paso a los intermedios en DBZ.
- El pez que Goku capturó en el primer episodio de DB, ¿ha vuelto a la vida con las bolas de dragón? o ¿será algún primo lejano? Bulma casi lo atropella con la nave de camino al parque de atracciones.
Para terminar, decir que en el segundo capítulo del manga se saltan estas vacaciones de Vegeta y van directamente al primer encuentro entre Goku y Bills, cuyo resultado ya se vio en la película Battle of God, pero con una sorpresa final. Daré un pista: no son de este universo…
Más Dragon Ball en el tercer capítulo: ¡¿A donde llevará este sueño?! ¡En busca del Super Saiyajin God!
P.d: la música de Nohirito Sumitomo, sigue siendo insulsa, sólo destacable en el breve entrenamiento de Vegeta gracias a ese solo de guitarra super afilado. Por lo demás, el resto de composiciones se encuentran a años luz del trabajo de Shunsuke Kikuchi. En este apartado DB Super tiene aun muchísimo que mejorar. Una lástima.
FUENTES:
- http://es.dragonball.wikia.com/wiki/Dragon_Ball_Wiki
- http://boladedragonz.com/
- http://dbesp.blogspot.com.es/
- http://diariodedragonball.blogspot.com.es/
Nos leemos.
Alberto R.C.
- VIDEA BIEN HERMANITO, VIDEA BIEN - 25/11/2015
- Ya están aquí… - 04/11/2015
- LOS GOONIES NUNCA DICEN MUERTO - 28/10/2015
- NO LLUEVE ETERNAMENTE - 21/10/2015
- Festival de Sitges 2015: Rick Baker - 14/10/2015
- Valencia Zombi Party - 05/10/2015
- Beetlejuice, Beetlejuice, BEETLEJUICE… - 28/09/2015
- Dentro del Laberinto (1986) - 21/09/2015
- RECORDANDO “THE EVIL DEAD” - 14/09/2015
- Dragon Ball Super x03: “¡¿A dónde llevará este sueño?! ¡En busca del Super Saiyajin God!” - 01/08/2015
Deja un comentario.